Me acuerdo de Siempre el mismo día... ¡Y SONRÍO! ¡Qué bien lo he pasado leyéndolo! Al acabarlo anoté algunas ideas en un folleto del LIDL pero creo que lo he perdido, en la calle o mi propio maremágnum. Y más ilusión me ha hecho aún, pensar que ya está hecha la película. Últimamente sólo leo 'guiones' pero mira que lo paso bien. Su historia es romántica, sí, sin final feliz, sí... pero es tan divertida, tiene tal cantidad de detalles graciosos, cómicos, de frases geniales cogidas al vuelo, de expresiones con las que no puedes evitar sonreirte. Lo he pasado así, bien y mal. Sé que con Dexter yo no tendría futuro. Valoraría la actitud de Emma (en una persona real) que es capaz de aguantar lo inaguantable en una amistad, sobreponiendo el amor y el cariño a las malas etapas. Yo hubiera plantado a Dexter a la primera de cambio. Realmente eso hizo Emma, le dijo que no podía volver a verle aunque le quería mucho. Y sí, también he sufrido con el final. No me lo podía creer. Cuando leí lo que le pasó a Emma, tendría que haberme visto: volviendo y revolviendo rápidamente las páginas para ver si aparecía en las siguientes... y creí verla, es verdad, pero sólo fueron espejimos de otra época. Estoy deseando ver la adaptación porque sé que también disfrutaré, aunque no tanto como lo he hecho con el libro... o eso creo.
Espero que le vaya bien y continúe escribiendo así. Un fuerte abrazo. Si rescato mis anotaciones ilegibles en la publicidad junto a la oferta de calabacines, le añadiré alguna nota. Un beso.
...Y una última cosa... acabo de tener un flash, un recuerdo agradable, de la relación epistolar (basada en su relación de dependencia, de mantener el contacto, de to be in touch) que tienen Em (¿era Emm?) y Dex durante su vida. Me reí muchísimo con las postales de Dexter: ¡INUNDADO EN VENECIA! y cosas así, mientras ella se dejaba el alma escribiéndole cartas con el corazón. Es genial como ha sabido captar las diferencias entre estas dos personas, reflejo de las que se dan hoy en día en cualquier parte... Y nada más, esa era mi última reflexión. Otro beso.
Espero que le vaya bien y continúe escribiendo así. Un fuerte abrazo. Si rescato mis anotaciones ilegibles en la publicidad junto a la oferta de calabacines, le añadiré alguna nota. Un beso.
...Y una última cosa... acabo de tener un flash, un recuerdo agradable, de la relación epistolar (basada en su relación de dependencia, de mantener el contacto, de to be in touch) que tienen Em (¿era Emm?) y Dex durante su vida. Me reí muchísimo con las postales de Dexter: ¡INUNDADO EN VENECIA! y cosas así, mientras ella se dejaba el alma escribiéndole cartas con el corazón. Es genial como ha sabido captar las diferencias entre estas dos personas, reflejo de las que se dan hoy en día en cualquier parte... Y nada más, esa era mi última reflexión. Otro beso.